Lake Travis es una de esas joyas ocultas que se encuentra en el centro de Texas, y es, sin duda muy apreciada por la ciudad de Austin. Situada en una zona de primera, Aquavilla, diseñada por Winn Wittman Arquitectura comenzó como un vestigio de casa de los 80’ y se ha transformado en una casa restaurada de ensueño.
El propietario de la casa tiene un gusto risueño y caprichoso, y el diseño que ha resultado de sus exigencias, expresa todo ese carácter.
Wittman se encuentró con muchos desafíos en este proyecto, ya que básicamente, se encontró con un lienzo en blanco al cual debía vestir de lujo total.
La estructura original estaba en mal estado, ya que sufrió muchos intentos de renovaciones previas, y fallidos.
Así, después de atravesar varios obstáculos y desarrollar una relación muy necesaria de confianza entre cliente y arquitecto, esta casa lujosa de diseño personalizado es exactamente lo que ambas partes habían previsto.
El sistema de paneles de metal fue específicamente diseñado para aprovechar la energía solar, pero no se dejó de lado la estética de la construcción. Gracias a esa iniciativa, una flor de liz que cuelga del techo se ilumina de noche.
Los garajes están construidos con la forma de ‘showrooms’, eso, con el objetivo de presumir la colección de autos que muchos de nosotros hemos visto sólo a través de las películas.
Su nombre, Acquavilla, está grabado en los vidrios ¡cómo para no olvidar el nombre de esta lujosa vivienda!