Sí pensabamos que ya nada nos podía sorprender en este mundo y que lo habíamos visto todo, estabamos muy equivocados. Un yate de lujo que tranporta su propia isla, con volcán incluido, es lo más sorprendente y estrambótico que se puede inventar.
La embarcación que todavía está en proyecto, tendrá 90 metros de longitud y contará con una suit principal y cuatro más para invitados. Tentrá una una playa con cabañas privadas, en su cubierta principal, y un imponente volcán del que se desprende un riachuelo que va a desembocar en una gran piscina.
Otra de las maravillas del super yate, son las islas flotantes que se desplegarán desde la popa para que los invitados tengan una plataforma a ras del agua y tengan la opción de zanbullirse, jugar o broncearse ese nivel.
Este imponente yate contará además con bar, spa, helipuerto, área recreacional, comedor exterior, y un pequeño muelle. Alcanzará una velocidad de 15 nudos y tendrá capacidad para diez personas.