Messana O’Rorke es una experta en la proyección de casas de lujo llenas de elegancia; y por eso, el que una granja del siglo XVII muy descuidada haya caído en sus manos, y hoy sea esta hermosa cabaña para unas vacaciones en la nieve, fue una bendición para los propietarios, y todo un reto para la profesional en diseño.
El nombre de la vivienda es Ten Broeck Cottage, y su historia comenzó con la compra de una granja y un huerto de manzanas del siglo XVII ubicados en el Condado de Columbia, en Nueva York.
El año de registro de la casa es 1734, pero tras varios años de renovación, la fecha de su origen de esta casa de lujo es realmente incierta.
El encargo fue el de crear una casa moderna, dentro del marco existente, y ampliar los servicios de la casa para que ella tenga la capacidad de brindar comodidad total.
Por lo tanto, la única premisa fue mantener el diseño dentro del típico estilo holandés de la casa de lujo.
El diseño de la casa se llevó a cabo de forma orgánica, dar unos pasos atrás en las varias remodelaciones que la casa había sufrido reveló la verdadera forma clásica de la de lujo…
Realmente, la casa tiene la apariencia de las casas que los niños suelen dibujar: dos enormes ventanas, una puerta sencilla, un techo con tejas, y una chimenea.
En el interior, la madera y el color blanco son los elementos de diseño que se han combinado para crear un ambiente rústico, pero sofisticado.