Con los famosos siempre hay que estar alerta porque son numerosas las veces que se pueden llegar a cambiar de casa, por regla general, aunque no siempre tiene por qué ser así. Se dice que Kim Kardashian ya ha encontrado la casa de sus sueños para compartir con su marido e hija, claro está. Una casa de lujo que como ya podéis imaginar cuenta con todo tipo de detalles exclusivos pero bajo la elegancia del color blanco y del estilo glamuroso que pisa en cada una de las habitaciones o baños que completan una casa de ensueño para muchos y de realidad para Kardashian.
La mansión de lujo en cuestión se encuentra en Hidden Hills y que dispone de un gran acceso que nos lleva a una casa de piedra muy amplia y con unos jardines que dan la bienvenida. Tanto es así, que si nos queremos hacer una idea de la enorme finca, tenemos que decir que cuenta con unos 8.000 metros cuadrados. Claro que en ella también podremos encontrar piscinas, así como Spa y hasta una bodega. Algo con lo que las casas de famosos suelen contar. Aunque por el momento, todavía están pendientes de vender su casa en Bel-Air.
El comedor está decorado en un blanco perfecto, tanto que los muebles lo acompañan así como la iluminación exterior que queda reflejada en unos grandes ventanales. Además, en su interior cuenta con muchos arcos que van de una habitación a otra e incluso los podemos ver por el pasillo. Las lámparas se combinan con las pequeñas pinceladas de color que tiene la casa y las alfombras van añdiendo el carácter elegante al pasillo. Éste nos lleva hasta los ocho dormitorios y los diez baños con los que cuenta esta casa.
Al salón le ocurre lo mismo que al comedor, ya que el color blanco es el que cuenta como principal en todos los sofás, en el suelo o paredes y hasta en el piano. Aunque bien es cierto que en los detalles se ve el contraste y para ello, nada mejor que una mesa en color negro que está acompañada de los cojines en la misma tonalidad. Las vigas de madera ponen la nota más rústica pero siempre dentro de la tónica de la exclusividad. No pueden faltar en ella el vestidor, fuentes y una terraza con sofás y decorada con una chimenea. Un sueño de casa y de entorno, sin duda.