Casi siempre comentamos como las grandes mansiones están cubiertas por grandes ventanales para así, aprovechar la luz del sol al máximo. Pues bien, hoy más que nunca esta casa se lleva la palma en cuanto a cristales se refiere. Situada en Amsterdam y con unas vistas impresionantes y panorámicas.
Un espectacular diseño de la mano de Hans Van Heeswijk Architects, que cuenta con una forma rectangular dispuesto en tres niveles diferentes, aunque con espacios totalmente abiertos.
Cada uno de los niveles está conectado entre sí, gracias a unas amplias escaleras metálicas. En el primer piso o planta, nos encontramos con la cocina y el amplio comedor, que aportan más luminosidad, si cabe, gracias a sus colores cálidos.
El salón ya se encuentra en la segunda planta y tiene un contrapunto en la decoración gracias a los sofás en color negro. Solamente hay una parte cubierta y en ella se encuentra el baño y las áreas privadas.