Una casa de lujo en Atlanta, con una fachada espectacular, gracias a sus ladrillos que ocupan la mayor parte de la casa, menos la zona de las ventanas, que le aportan la combinación sofisticada que esta casa necesita. Un lugar ejemplar, de corte clásico, hecho con los mejores materiales.
Una entrada amplia con suelos de madera y un recibidor central, que da paso a unas enormes escaleras. El comedor es más bien pequeño, con una mesa redonda y una gran lámpara que preside la estancia.
El color dominante es el dorado, añadiéndolo, incluso en el papel que vemos en las paredes. La sala-biblioteca es un lugar compuesto de caoba y tonos tierra, bastante clásico, que da con el estilo para una buena tarde de lectura.
La chimenea, aporta el toque elegante y acogedor del salón, las grandes ventanas darán la iluminación necesaria para un mejor ambiente. Cinco dormitorios y terraza cubierta, además de las zonas ajardinadas, completan esta mansión en Andrews Drive.