No es de extrañar que una isla con más de 500 hectáreas haya sido la elegida por varios arquitectos para construir todo un paraíso de lujo y del buen gusto. La belleza del mar que la rodea hace de este lugar un sitio increíble.
Unas villas de lujo con formas asimétricas que parecen un escaparate, todo recubierto de cristales, para una mejor entrada de la luz.
Si no llegaba con tener el mar delante, también puedes deleitarte con la enorme piscina a pie de salón, desde donde podrás pasar esas horas de descanso dándote un baño relajante o por el contrario disfrutar de todo ello desde un cómodo salón.
Una creación totalmente futurista con su decoración en colores blancos o beige que contrastan enormemente con el color del mar. Un sinfín de comodidades que podrás encontrar en otro de los lugares de ensueño.
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