La casa del compositor Moby, si es que puede llamarse casa, porque más bien parece un palacio, se encuentra apartado de toda civilización. En contacto puro con la naturaleza, ya que se encuenta en las colinas de Los Ángeles, y rodeado de grandes zonas ajardinadas y espacios para el descanso.
Un castillo construido sobre el 1920 pero que el músico se ha encargado de reformar al milímetro para dar lugar a un hogar de lo más acojedor.
A pesar de todas las reformas, es verdad que su fachada y estilo exterior parece un tanto más clásico que su interior, que tiene pocos muebles, una decoración muy suave, sin demasiadas extridencias.
Un estilo moderno en sus muebles de colores claros, que se mezclan en dos tonos de madera diferentes. Amplios espacios y vistas espectaculares para esta mansión de lujo.