El reloj más caro del mundo es también uno de los más complicados que se han hecho en cuanto a ingeniería relojera. ¿El precio? $11 millones tras una reñida subasta en Sotheby’s.
El reloj de bolsillo elaborado en oro cuenta con 24 complicaciones fue el resultado de una larga competencia entre dos magnates de la época dorada de los Estados Unidos. El financiero Henry Graves Jr. Y el ingeniero automovilista de Ohio James Ward Packard se retaron el uno al otro a ser dueños de la pieza de relojería con mayor número de complicaciones.
La ‘complicación’ en relojería es cada una de las funciones que tiene un reloj, aparte de indicar horas, minutos y segundos.
Ambos magnates le encargaron piezas de relojería a Patek Philippe, durante más de 20 años. A lo largo de ese tiempo, Philipe fue creando distintos relojes con varias complicaciones, que más tarde se sumaron para dar el producto final que fue subastado en Sotheby’s.
Entre las complicaciones que terminaron caracterizando al actual reloj más caro del mundo están: un calendario perpetuo con las fases de de la luna, indicador de alba y ocaso, carta celestial indicado las constelaciones sobre la casa de Graves en Nueva York, diferentes funciones horológicas para cada horas, minuto y segundo… y una lista de cualidades que realmente hacen que el reloj valga los $11 millones.
Sotheby’s tenía un estimado de $3 millones para la venta del reloj de Graves, pero un coleccionista casi cuadruplicó su estimado.