Cada vez que vemos una alfombra roja nos fijamos en los vestidos que llevan nuestras famosas favoritas ya que casi siempre suelen ser prendas únicas y de colecciones de diseñadores de lujo. En este caso, no necesitamos una alfombra para fijarnos en él, ya que se le ha denominado como el vestido más caro del mundo.
Un vestido largo y recto que llega hasta el suelo, incluso desemboca en una fina cola, con lo que podemos otorgarle el rango de alta costura, aunque si hablamos de su precio, éste lo dice todo.
Nada más y nada menos que cuatro millones y medio de euros es lo que cuesta este precioso vestido que está formado en su gran parte de diamantes negros, concretamente 50.
Además, cuenta con una especie de bordados en su parte delantera que están hechos con oro. Bajando por el vestido, se puede apreciar como son los diamantes blancos los que cobran protagonismo.
Al estar compuesto de estas piedras preciosas, hay que decir que cuenta con un peso de unos 13 kilos. La diseñadora que ha tenido la brillante idea de hacer esta prenda tan especial es Debbie Wingham.
Con un corte muy moderno, ya que cuenta con un corpiño de estilo peplum y palabra de honor se ha convertido en el vestido más caro del mundo. Además, en la parte de la falda cuenta con una amplia abertura.
La parte baja que cubre las piernas, está hecha de gasa, lo que le da el toque sexy al poder lucir las piernas. Una prenda de lujo que se ha convertido en un vestido único y especial.