Una mansión exclusiva en un entorno ideal donde el mar es un fiel amigo que la rodea y le da un toque de lujo mayor, si cabe. Una casa situada en Rhode Island, en una de sus zonas costeras y que está decorada con una fina piedra que le da el toque rústico.
En su parte exterior, además de la belleza del paisaje, nos encontramos con una amplia piscina. En ella también encontramos una zona de relax con tumbonas de color azul, haciendo juego con el agua de la misma.
Claro que si nos adentramos en ella, el color azul se desvanece para dar paso a tonos más apropiados de las casas de lujo. El blanco corona la cocina que se combina con el suelo oscuro de la madera.
El baño tiene una gran ventaja y es que, una pequeña ventana se encuentra justo al lado de la rectangular bañera. Un entorno de ensueño, tanto en el exterior como en todas las habitaciones interiores.
Si pasamos al salón, nos encontramos con unos sofás en color beige que se combinan con otros llenos de estampados. Una chimenea le da calidez al entorno y las cortinas dejan pasar la luz entre las ventanas semi-circulares.
Esta propiedad fue construida en el año 2009, por lo que podemos suponer que se ha hecho con los mejores materiales. Aunque uno de los materiales más preciados son esas vistas que nos deja y el lugar donde está ubicada.
Además, dispone de un embarcadero privado, un total de seis dormitorios y unos ocho baños. Sin duda, otra de las mansiones que se han convertido, a simple vista, en nuestra favorita.